Una pequeña alma quería aprender a vivir,
no podía, no dejaban, que sus alas se abran.
Unos angeles de pasivo caminar
aparecieron para mostrarle la verdad.

¿Quiénes eran ellos?
¿Porqué hacían lo que hacían?
Si ella solo era un alma herrante,
sin sentido y sin destino alguno.

Queriendo terminar con su vida,
entre rastros de filosofa
y una niña metida en la locura,
ellos encontraron lo que ella
jamás había buscado.

Entre dudas y esperanzas
el pequeño ser cambiaba, sin saber,
de angel a demonio, de demonio a angel
todo el tiempo.

Un largo tiempo,
sumergio en oscuridad
a todos a su alrededor,
incluyendo a aquellos quienes
la habian sacado de donde
ella se había estancado.

Pensaba que moría lentamente al no
poder revertir su maligna creación,
que ella mísma creo a partir de una mentira.

Ellos ayudaron a empezar a arreglar
todo el infierno qe habia creado.
Sintio que jamás debería jugar
otra vez con el angel y el demonio
que dentro de ella convivían.

Ahora ella se preguntaba...
¿Cómo decir que estaba verdaderamente enamorada?
¿Cómo podía ella afirmar que cada vez qe recordaba aquello
el dolor, la angustia y la bronca hacia ella brotaba?

[...]

Podría seguir eternamente ya que mucho que expresar es lo que tengo, pero lo que quiero hacer con esto es dar las gracias y pedir perdon...
Porque te amo, porque sin vos no sé que sería, porque nos queda
mucho tiempo, alegrías, tristesas y mucho que vivir juntos, que aprender, muchas cosas que enfrentar para seguir creciendo.
Mi Amor, Mi Hermoso Ángel, Quiero Seguir Creciendo Juntos, Sé Que Vos También,

¡¡TE AMO!!